«Que realicemos recortes no quiere decir que se paralice la ciudad»

El alcalde de Tavernes cumple un año al frente del gobierno. El primer edil ha tenido que lidiar con la crisis económica y con las incesantes críticas de la oposición. Pese a todo, son varios los proyectos que se han impulsado para dinamizar el municipio. 

 

-Se cumple ahora un año desde que usted ocupó la alcaldía ¿Cree que ha cambiado su manera de ser o de entender las cosas?

-No he cambiado. Soy el que era, con los mismos defectos y virtudes, sigo dando clases en la universidad y tengo los mismos amigos y la misma novia. El hecho de ser alcalde implica una dedicación las 24 horas al día y te da una visión diferente de las cosas. Te das cuenta de que ejecutar las acciones de gobierno no es tan rápido como quisieras. 

 

-¿Se esperaba que ser alcalde fuera así?

-El alcalde no hace a la persona, es la persona la que hace al alcalde. Me gusta trabajar en equipo, gestionar eficientemente los recursos y escuchar a los vecinos. Ya fui regidor, por lo que sabía lo que significaba. 

 

-Usted pertenece al Bloc y forma gobierno junto con el PSPV y la concejala Karina Vercher. ¿Hay buena sintonía?

-La química es buena porque la acción de gobierno se basa en el consenso y el diálogo. No trabajamos por parcelas separadas, al contrario, las concejalías están coordinadas y la colaboración es total. Es más, con buena parte de los regidores también se han establecido relaciones de amistad. 

 

-En este año al frente de la alcaldía ¿cuál ha sido el momento más gratificante?

-Hay muchos, como la revisión catastral, la firma del préstamo ICO para que cobren los proveedores.Para mí es muy gratificante trabajar por los vecinos para tener una ciudad mejor. Respecto al préstamo ICO, vemos que los alcaldes de la crisis en vez de firmar préstamos para inversiones los firmamos para pagar deudas o facturas de la legislatura anterior. 

 

-¿Y lo más complicado?

-Ver cómo la gente pasa dificultades y darte cuenta de que no tienes todas las posibilidades que quisieras para prestarles la ayuda que necesitan. 

 

-¿Cuál considera que es el mayor problema que tiene Tavernes?

-Al igual que en otras ciudades, el mayor problema es el paro. La situación de los sectores productivos hace que tengamos una desocupación elevada. El PGOU no permite, a corto plazo, poder ofrecer un lugar para que se establezcan nuevas empresas e industrias. Lamento la política española y de la Generalitat referente a los recortes. Desde nuestras posibilidades intentaremos fomentar el turismo, el comercio, la industria y la agricultura.

 

-Usted ha expresado en multitud de ocasiones que hay que reducir el gasto y la deuda, pero también ha tenido críticas por promover eventos como el Festivern o por la creación de la plaza de gabinete de prensa.

-Son comentarios demagógicos sin fundamento. El caso del gabinete de prensa pertenece al capítulo de recursos humanos, en el que hemos tenido una gran reducción al haber revisado el convenio colectivo, por no estar cubriéndose las vacantes por jubilación y por no renovar las comisiones de servicio. Con respecto al Festivern, sólo tuvo gastos en horas extras de la Policía Local y supuso muchos beneficios proque a Tavernes vinieron 6.000 personas. Nuestra ciudad se situó en el mapa, se dio cobertura en los medios, sirvió para hacer crecer el consumo, especialmente en la hostelería. Justamente hemos experimentado una reducción en la partida de fiestas.Que realicemos recortes no supone que se paralice la ciudad. Tavernes ingresa casi 15 millones de euros, lo que significa que no habrá grandes inversiones. Estamos acabando con el déficit y seguiremos haciendo el Festivern, fiestas patronales o el rocódromo. 

 

-¿Cuál es su objetivo para esa legislatura?

-Vamos a apostar por la playa buscando un turismo alternativo; daremos cabida a la participación. Ya hemos fraccionado el IBI para que no sea una carga y pondremos este verano un funcionario en la playa para dotarla de un registro de entrada y evitar desplazamientos.

 

-En las últimas semanas ha surgido una gran polémica entre el gobierno y la oposición en relación al Plan de Ajustes. El PP les acusa de haberse equivocado en las cuentas y no contabilizar el incremento del IBI en este plan.

-El problema del PP es que no se leyó el Real Decreto que marcaba el Plan de Ajustes. Para calcular el IBI hay que considerar que el Ayuntamiento no ingresa toda la contribución, por la crisis se supone que habrá gente que no la pagará, por lo que se obtiene la media de lo recaudado en 2009, 2010 y 2011 y se saca una proporción para aplicarse al programa marcado por el ministerio. Intervención emitió un informe en el que se indicaba que el plan del PP no se adaptaba al Real Decreto. 

 

-¿Van a revisarse los valores catastrales?

-Tenemos el compromiso de la Gerencia de Catastro de Valencia y la revisión de los valores catastrales se realizará el próximo año y se aplicara en 2014. La revisión implica ventajas porque el IBI no subirá tanto y también será beneficioso para los vecinos a efectos de renta. 

 

-¿Qué novedades puede contar de la piscina cubierta?

-La empresa responsable de la construcción y explotación de la piscina durante los próximos cuarenta años está en concurso de acreedores. Se están siguiendo los pasos que marca la ley. Se ha nombrado un administrador que considera que se puede reflotar la empresa y ahora será el juez quien tenga que aprobar el plan de viabilidad.El ayuntamiento podría pedir rescindir el contrato, pero implicaría tener que indemnizarla con más de un millón de euros y pensamos que es mejor dar la oportunidad de que la empresa se pueda reflotar. 

 

-El parking de Tavernes es deficitario. ¿Hay algún plan para rentabilizarlo?

-El parking es uno de los mayores problemas que tenemos porque la empresa lo abandonó y el Ayuntamiento entró en un proceso de liquidación en el que debe indemnizar a la empresa por el valor de las obras con dos millones de euros.Hemos hecho una negociación a tres bandas entre Consistorio, empresa y banco para lograr que esa cantidad no se pagase de golpe con el fin de que esos dos millones no afectasen al presupuesto anual. Ahora estamos preparando una ordenanza para obtener bonificaciones y regular los precios del parking. 

 

-¿En qué situación está la urbanización del Vergeret?

-El Vergeret es un problema heredado. Es una urbanización que no tiene permiso de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y tiene una sentencia que pide la demolición de 500 viviendas. La solución pasa por canalizar el río y así el Vergeret ya no sería inundable. El problema es que en los presupuestos del Estado de 2012 no aparece la obra.

 

-¿Cómo se ve dentro de cuatro años?

-Espero dentro de cuatro años seguir haciendo lo mismo, ya que esta es mi pasión. Si las elecciones fueran mañana, me volvería a presentar.

 

«Que realicemos recortes no quiere decir que se paralice la ciudad»

 Las Provincias,  05.06.12 - CARLES GIMENO, TAVERNES.